Jardines del Rey reafirma su posición como destino turístico de excelencia en Cuba
La región Jardines del Rey, ubicada en la zona centro-norte de Cuba, mantiene su reconocimiento como uno de los principales destinos turísticos del país. Guías especializados y profesionales del sector destacan el atractivo natural del área, así como su conservación medioambiental, elementos que consolidan su imagen como un verdadero paraíso para vacacionar.
Numerosos viajeros han coincidido con esta valoración en encuestas realizadas por administraciones hoteleras y gerencias locales. Las opiniones resaltan la belleza del paisaje, la calidad de los servicios y el respeto por el entorno natural, factores que fortalecen el posicionamiento internacional de Jardines del Rey.
Este enclave turístico forma parte del archipiélago Sabana-Camagüey y agrupa varios cayos con alto potencial recreativo. El nombre Jardines del Rey, hoy convertido en marca, fue otorgado por el explorador español Diego Velázquez entre 1513 y 1514, en homenaje al rey Fernando el Católico. Esta denominación se mantuvo como oficial hasta principios del siglo XX, cuando la zona permanecía prácticamente deshabitada, visitada solo por carboneros y pescadores con asentamientos temporales.
La transformación de este territorio en polo turístico comenzó a consolidarse en noviembre de 1993. Desde entonces, el desarrollo ha seguido una trayectoria ascendente, impulsado por la riqueza natural de la cayería y por infraestructuras modernas que facilitan el acceso. Entre ellas destaca el aeropuerto internacional inaugurado en septiembre de 2002, con una pista de tres mil metros y capacidad para recibir todo tipo de aeronaves. Su terminal puede atender hasta 600 pasajeros por hora. También existe una vía terrestre de 17 kilómetros conocida como Pedraplén, que conecta los cayos con tierra firme.
Cayo Coco constituye el eje principal de la región. Es la cuarta isla en extensión del archipiélago cubano, con 370 kilómetros cuadrados y 22 kilómetros de playa. Su nombre proviene del ave Coco o Ibis del bosque, de plumaje blanco y pico curvado. En el área también se encuentran los cayos Guillermo, Cruz, Paredón Grande y Antón Chico, todos incluidos en los planes de desarrollo turístico. La zona posee una capacidad proyectada de hasta 22 mil habitaciones.
Cayo Guillermo abarca 13 kilómetros cuadrados y ofrece casi seis kilómetros de playas, entre ellas Pilar, que alberga la mayor duna arenosa del Caribe con 15 metros de altura. Paredón Grande dispone de ocho kilómetros de playas, mientras que Antón Chico completa el conjunto con características similares. La biodiversidad de la región incluye más de 200 especies de aves, entre ellas el emblemático Flamenco Rosado, y una flora compuesta por aproximadamente 385 especies, de las cuales 28 son endémicas.
Las playas representan el principal atractivo de Jardines del Rey. Aunque estrechas, sus aguas cristalinas y fondos bajos ofrecen condiciones ideales para el descanso y la recreación. En total, suman 38 kilómetros de litoral que complementan la oferta turística.
El área cuenta con múltiples opciones de entretenimiento, como el Sitio La Güira, la Cueva del Jabalí, Cayo Mortero, La Silla, el Club del Aire y un tren turístico que recorre Cayo Coco y Guillermo. También se ofrecen paseos en motos, excursiones en ómnibus, minitrenes y coches de caballos. Las actividades acuáticas incluyen buceo y recorridos en barcos, catamaranes y otras embarcaciones.
Jardines del Rey dispone además de un Centro Spatalasso, especializado en tratamientos para mejorar la calidad de vida, aliviar dolencias y reducir el estrés. Este centro ofrece atención profesional en un entorno privilegiado frente al mar, lo que refuerza el atractivo integral del destino.
La región continúa su evolución como uno de los polos turísticos más importantes de Cuba, respaldada por su historia, su riqueza natural y una infraestructura que garantiza experiencias memorables para visitantes nacionales e internacionales.




