El Faro Vargas de Cabo Cruz, 150 de vigía al sur de Cuba
Por Rolando Pujol
Fotos del autor
Cabo Cruz es uno de los lugares más apartados de la geografía cubana, ubicado en el extremo sur de la Provincia Granma, a la entrada del Golfo de Guacanayabo. El pueblo más cercano, con el cual se enlaza por una carretera de 30 Km, es Niquero, donde radica el gobierno municipal de la zona. El entorno natural de Cabo Cruz, con sus bosques, marismas y terrazas marinas, forma parte del Gran Parque Nacional Desembarco del Granma, una de las áreas protegidas mejor conservadas en la isla.
Fue en su Segundo Viaje al Nuevo Mundo cuando Cristóbal Colón descubrió este punto del litoral suroriental, el 3 de mayo de 1494. Lo bautizó como Cabo Cruz, por celebrarse ese día la Fiesta de las Cruces. El conocimiento de la existencia de este lugar, no impidió que durante siglos, Cabo Cruz quedara en manos de Dios, donde su aislamiento lo convertiría en refugio de indios insumisos, negros cimarrones y gente de paupérrima condición que buscaban su sustento en el mar.
Los arrecifes de la barrera de coral hacían muy peligroso el cabotaje por aquella costa agreste, lo que unido al incremento del tráfico marítimo comercial, durante la segunda mitad del siglo XIX, hizo ver a las autoridades coloniales la conveniencia de construir un faro en Cabo Cruz para garantizar la seguridad de la navegación.
La edificación fue emprendida por el Cuerpo de Ingenieros Civiles de Obras Publicas, con la colocación de la primera piedra el 31 de enero de 1859. Se empleó como mano de obra fundamental a los presos, quienes levantaron también la casa del torrero y las barracas de la guarnición militar.
No exentas de dificultades logísticas y financieras, y ante el temor de un ataque en 1868 de las fuerzas insurrectas, las obras se interrumpieron varias veces, hasta que el 5 de mayo de 1871, después de doce años, quedó inaugurado oficialmente el Faro Vargas, en honor al brigadier Carlos de Vargas Machuca, comandante del Departamento Oriental por esa época.
Vinculado a diversos acontecimientos históricos, como las expediciones navales insurrectas en las guerras de independencia del siglo XIX y el desembarco del yate Granma, que dio inicio al levantamiento armado comandado por Fidel Castro en 1956, el Faro de Cabo Cruz, como se le conoce actualmente, fue declarado Monumento Local de Cuba en 1991.
Su torre de sillería se levanta hasta una altura de 32 metros y 34 sobre el nivel del mar. Su cúpula está construida de acero inoxidable, con un lente Fresnel, de fabricación francesa que gira con su sistema de cuerda, sobre una cubeta de mercurio, para eliminar la fricción. Su destello de luz alcanza 36 millas náuticas. Para subir al fanal se asciende por una escalera de caracol de 155 escalones. Desde lo alto del faro se contempla el extraordinario paisaje marino de la zona.
El Faro Vargas de Cabo Cruz, a 150 años de su inauguración sigue prestando su útil servicio las 24 horas del día, en uno de los parajes más distantes y hermosos de la geografía cubana, facilitando las comunicaciones y la orientación de la navegación marítima y aérea en la zona. El lugar está habitado hoy por una próspera comunidad de pescadores, amables anfitriones de todo aquel que incluya en su itinerario de viaje por Cuba visitar el faro de Cabo Cruz.
