Última superluna de 2025 iluminará diciembre
La última Luna llena de 2025 coincidirá con la última superluna del año y tendrá lugar el 4 de diciembre en la constelación de Tauro, según informó el portal especializado starwalk.space. Este fenómeno astronómico marcará un cierre especial para el calendario lunar del año y atraerá la atención de observadores en distintas regiones del planeta.
La Luna llena de diciembre recibe el nombre de Luna Fría o Luna de las Noches Largas en el hemisferio norte. Esta denominación se relaciona con su proximidad al solsticio de invierno, cuando las noches alcanzan mayor duración y las temperaturas descienden de manera notable. La tradición cultural y científica ha asociado este evento con la llegada de la estación más fría del año, lo que refuerza su carácter simbólico y natural.
El portal astronómico señaló que la última superluna de 2025 se apreciará un 8 por ciento más grande y un 15 por ciento más brillante de lo habitual. Este incremento en tamaño y luminosidad permitirá a los observadores distinguir detalles con mayor claridad y disfrutar de un espectáculo visual que supera las características de una Luna llena común.
Las regiones situadas al norte del ecuador tendrán la oportunidad de contemplar cómo el astro asciende más alto que cualquier otra Luna llena hasta el año 2042. Este fenómeno ocurre gracias a una parada mayor lunar, conocida como lunar standstill, que se produce cuando la trayectoria de la Luna alcanza los extremos del cielo. La elevación extraordinaria del satélite natural ofrecerá una experiencia única para quienes se encuentren en latitudes septentrionales.
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En contraste, el hemisferio sur observará la Luna en una posición inusualmente baja sobre el horizonte. El portal especializado explicó que este efecto generará un brillo cálido dorado o rojizo, resultado de la interacción con capas atmosféricas más densas. La tonalidad especial añadirá un matiz distintivo al espectáculo astronómico y reforzará la percepción estética de quienes contemplen el fenómeno desde esas latitudes.
El acontecimiento se suma a la lista de fenómenos naturales que despiertan interés global y que fortalecen la conexión entre ciencia, cultura y observación del cielo. La última superluna de 2025 se convierte así en un evento que invita a la contemplación y al registro de un momento irrepetible en el calendario astronómico.




