Temporada Ciclónica: Ondas que llegan desde África
La Temporada Ciclónica del 2021 comenzó el día 1º de junio, en el área comprendida por el océano Atlántico Norte, el mar Caribe y el Golfo de México. Una de las fuentes principales de formación de ciclones tropicales en esta área la constituyen las Ondas Tropicales. A ellas va dedicada el artículo de esta semana.
Una Onda Tropical es también el sistema meteorológico más frecuente en el verano de nuestra área geográfica. Como promedio, en el período de junio a noviembre de cada año, unas 60 a 80 Ondas tropicales surcan el Atlántico, desde África, hasta el mar Caribe y el golfo de México.
Pero, ¿qué es una Onda Tropical? Pues no es más que una vaguada o línea de baja presión en los trópicos, donde la presión es más baja que en sus alrededores, bien sea a la izquierda o a la derecha. Esa área elongada de bajas presiones se orienta de norte a sur y se diferencia, de otras vaguadas comunes en el trópico, en que la Onda Tropical se mueve, y se mueve del Este al Oeste por toda la zona tropical, impulsada por los vientos de región Este que prevalecen en el trópico, a no ser que antes se desarrolle en un ciclón tropical.
Las Ondas Tropicales se forman precisamente en ese flujo del Este a lo largo del lado ecuatorial del Anticiclón del Atlántico, en el caso de nuestra zona geográfica, al norte de la llamada Zona Intertropical de convergencia (ITCZ), que es una vaguada o zona de bajas presiones frontera entre las altas presiones del Hemisferio Norte y del Sur.
Las Ondas tropicales del Atlántico Norte se generan en zonas de tiempo perturbado que pueden tener su origen en lugares tan lejanos como sobre Sudán, en la parte este de África. De ahí parten sobre el continente africano y emergen al Atlántico. Se generan o son amplificadas por la presencia de fuertes corrientes de vientos superiores sobre África, llamada la Corriente en Chorro Africana del Oriente. Las corrientes del Anticiclón del Atlántico, o Anticiclón semi permanente de las Azores-Bermudas, impulsan a la onda hacia las aguas abiertas del Atlántico tropical.
Las ondas tropicales poseen dos características que resultan de la mayor importancia:
- Son fuente de lluvia para las islas tropicales. Como promedio de 2 a 3 ondas tropicales se mueven por el Caribe cada semana, incentivando los procesos de lluvias, y esto es muy importante, porque la lluvia ocasionada por los chubascos y tormentas eléctricas producidas en tierra por el calentamiento del día, son realmente insuficientes.
- Las ondas tropicales son el origen de aproximadamente el 60 % de los ciclones tropicales del Atlántico y el 85 % de los huracanes de Gran intensidad (Categoría 3, 4 o 5).
Cuando una Onda Tropical se mueve muy rápido, digamos que a más de 30 km/h, sus vientos pueden alcanzar la fuerza de tormenta tropical en algunas áreas, pero no se considera que se ha formado un ciclón tropical. Ello ocurre, sólo si se desarrolla una circulación cerrada de los vientos alrededor de un centro de baja presión atmosférica, con vientos del Oeste en la porción más al sur de esa circulación cerrada.
Generalmente, a las Ondas tropicales que se mueven rápido les es más difícil desarrollar un ciclón tropical.
Ahora bien, si tenemos una Onda Tropical que se mueve a 30 km/h o menos, está sobre el mar, hay alta temperatura de la superficie oceánica, la onda presenta inestabilidad, o sea, crecimiento de áreas de chubascos y tormentas eléctricas a ambos lados de la onda, y sobre todo, si los vientos en la vertical tienen poca diferencia en velocidad o dirección, desde los 12 a 10 kilómetros de altura a la superficie, lo que los meteorólogos llamamos “poca cizalladura del viento en la vertical”, lo más probable es que en esa onda tropical se genere un ciclón tropical, por lo que es un sistema que hay que observar, y vigilar, con atención, sobre todo si está próximo a áreas terrestres.
A veces, ocurre el proceso contrario: un ciclón tropical inicia un proceso de debilitamiento y se disipa, quedando entonces una Onda Tropical.
La energía que da lugar al desarrollo de la Onda tropical en tierras africanas, viene dada por el contraste entre el aire muy caliente sobre el desierto del Sáhara y el aire más fresco, y muy húmedo, de las zonas extensamente pobladas de árboles en el área del golfo de guinea y la zona central del continente africano. Y por supuesto, el verano es la principal época del año para que esto ocurra, debido al fuerte calentamiento que sufre el desierto del Sáhara.
Sin embargo, si bien el desierto del Sáhara beneficia el surgimiento de las Ondas tropicales en África, una vez sobre aguas del Atlántico puede actuar en detrimento de las ondas tropicales, ¿por qué? Pues por nuestro conocido Polvo del Sáhara que, en los meses de junio, julio, y a veces hasta la primera quincena de agosto, fluye desde las costas africanas hacia el Atlántico, llevando un aire muy seco que impide, o limita bastante, el desarrollo ciclónico tropical, y hasta la propia vida de la Onda tropical a la que llegue la influencia del polvo del Sáhara africano.
Un ejemplo de lo anterior es el mes de julio, en el cual como promedio salen de África 10 Ondas Tropicales, pero que no se desarrollan y ni siquiera tienen actividad de tormentas eléctricas la mayoría de las veces.
Al amainar la llegada del polvo del Sáhara al Atlántico y el mar Caribe durante los meses de agosto y septiembre, se produce el pico de actividad de tormentas eléctricas e inestabilidad en las Ondas Tropicales, y por ello es durante estos dos meses que se produce la mayor cantidad de Tormentas Tropicales y huracanes en el Atlántico Tropical.
