La Temporada Ciclónica del 2021 Hasta Ahora

Estamos comenzando la tercera decena del mes de julio este miércoles 21, y recordemos que es este el segundo mes de la Temporada Ciclónica del Atlántico.

Hasta el presente han ocurrido sólo cinco ciclones tropicales con nombre: Las Tormentas Tropicales ANA, BILL, CLAUDETTE y DANNY, así como el Huracán ELSA.

A primera vista, no parece ser gran cosa esta temporada hasta el momento, pero no se descuiden, que realmente no es así.

Hay que destacar que la Tormenta Tropical ANA fue un sistema temprano, surgido antes del comienzo de la actual temporada, el 22 de mayo, mientras que BILLL, CLAUDETTE y DANNY vieron la luz en junio.

Realmente, la Temporada Ciclónica del 2021 ha sido, hasta el momento, más activa que la climatología de los pasados 30 años (1991 – 2020), en la cual en el mes de mayo se forma una tormenta con nombre sólo una vez cada tres años, y sólo una vez cada año, en junio. Eso ha sido sobrepasado ya en la presente temporada.

De hecho, ANA ha marcado el séptimo año consecutivo en que se forma una tormenta tropical en mayo, mientras que junio fue uno de los más activos, empatando sus tres tormentas tropicales, con las que hubo en junio de las temporadas de 1886, 1909, 1936 y 1968, que están empatadas en dicho récord.

Con el mes de julio, vino entonces el Huracán ELSA. Este sistema se formó el 1 de julio y desplazó de su puesto a la Tormenta Tropical EDOUARD del pasado año 2020 como la quinta tormenta tropical que más temprano se haya formado en una temporada, adelantando la fecha en cinco días.

También tenemos que tomar en cuenta que, hasta la fecha, la Temporada Ciclónica del 2021 ha ocasionado ya pérdidas materiales por algo más de 390 millones de dólares estadounidenses, mientras que lamentablemente se han reportado 19 muertes directas e indirectas.

Pero, este corto período de actividad ha quedado ahora en pausa. Después que ELSA terminó de existir el pasado 9 de julio, no se ha formado ningún otro sistema ciclónico tropical, y durante los próximos días, es difícil que ello ocurra.

Hay que pensar en cuál es el momento de la Temporada Ciclónica del 2021 en el que nos encontramos. Una temporada ciclónica “oficial” consta de un total de 183 días. Hasta hoy han transcurrido sólo 50 días de la presente temporada, es decir, el 27 % de la misma. Y hay que recordar algo que, se muestra muy bien en el siguiente gráfico:

Huracanes y tormentas
Este es el momento en el que estamos

 

Huracanes y tormentas 2
Falta de la temporada ciclónica del 2021 todo lo encerrado en el círculo, sobre todo la etapa más activa desde agosto a octubre, y el pico alrededor del 10 de septiembre

 

Pero porqué ocurre esta pausa. Es que, en esta época del año, usualmente la atmósfera sobre la zona generadora de ciclones tropicales del Atlántico aún no es favorable a que se formen áreas de chubascos y tormentas eléctricas organizadas, que son necesarias para que se forme un ciclón tropical.

Ciclones tropicales julio

 

Ciclones tropicales septiembre
Obsérvese la gran diferencia entre la última decena de julio y la primera decena de septiembre en la cantidad de tormentas tropicales y huracanes en la región generadora principal del Atlántico

 

Eso ocurre por la Capa de Aire del Sáhara (SAL), que sale de África al unísono casi con las Ondas Tropicales, e influye sobre el Atlántico. Esta Capa de Aire del Sáhara está compuesta por un aire seco, y trae asociada altas concentraciones de finísimo polvo procedente de las tormentas que ocurren en el Desierto del Sáhara en el Norte de África. Ese aire seco, penetra en las Ondas Tropicales e impide que generen actividad importante de chubascos y tormentas eléctricas.

Polvo del Sahara
Imagen tomada ayer, julio 20 de 2021, sonde se muestra la gran capa de aire seco con polvo del Sáhara en el Atlántico tropical

 

También, hay una zona de fuerte cizalladura vertical o, dicho de otra manera, cambios importantes en la velocidad o dirección del aire con la altura, que es un factor que no permite que cualquier circulación ciclónica que se quiera formar en la superficie, vaya a desarrollarse en una estructura vertical, rompe, en otras palabras, la posible estructura vertical, por lo cual tampoco puede existir en esas condiciones ninguna tormenta tropical o huracán.

Incluso se dan áreas de hundimiento del aire sobre esa zona del Atlántico, haciendo aún más difícil cualquier formación ciclónica.

Es por eso que usualmente en junio, julio, y a veces hasta la primera decena, o mitad, de agosto, hay poco desarrollo, en esta zona tan importante para el Caribe como es la llamada “Región Generadora del Atlántico”

Pero, pasado el período mencionado, estos factores desfavorables tenderán a desaparecer, quizás tan pronto como con el inicio de agosto, aunque a veces tarda un poco más.

Por ello, agosto seguramente será diferente, sobre todo a finales del mes. Habrá altas temperaturas en la superficie del mar, por lo tanto, habrá combustible, y si los factores que ya mencioné disminuyen en cierta medida, ahí estarán creadas las condiciones para que se manifieste la actividad ciclónica, quizás de manera explosiva, casi seguro en agosto, pero a más tardar a principios de septiembre.

Sumando estas perspectivas, junto a hechos como que las últimas cinco temporadas han sido muy activas, junto a las predicciones de algunos modelos que, aunque por su largo plazo no puedan gozar de gran confiabilidad, sin embargo, pudieran ser indicios que posiblemente nos dé la atmosfera a través de ellos, hay que estar siempre preparados y alertas. Las tormentas tropicales y huracanes con origen en el Atlántico Tropical, tienen un camino bastante seguro hacia nuestro mar Caribe, especialmente desde la segunda mitad de agosto, en septiembre, y después viene octubre, con el área más activa en el Caribe Occidental. Tenemos que estar atentos, y vigilar el Atlántico en estos meses.

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