Contrario a lo esperado, el Hielo Ártico no se recupera

La región ártica es realmente un océano, con la peculiaridad de que allí no existen grandes masas terrestres. El océano Ártico, es el más pequeño, y también el de menor profundidad, de los cinco océanos principales del Mundo…. Es también el más frío.

Otra característica muy peculiar que lo distingue es que, contrario de lo que sucede con el resto de los océanos, todos superiores en superficie a cualquier país, el océano Ártico resulta menor en extensión que Rusia.

Este océano rodea al polo Norte de La Tierra, y está cubierto por una capa de hielo que sufre cambios cíclicos anuales. Los hielos de la capa ártica se derriten en cierta medida desde el mes de marzo hasta septiembre, coincidente con la primavera y el verano del Hemisferio Norte. El hielo ártico alcanza su extensión mínima precisamente en septiembre, pues a partir de octubre, ya pasado el Equinoccio de Otoño, el agua vuelve a congelarse paulatinamente, y la capa de hielo ártico se va recuperando, hasta alcanzar su máxima extensión nuevamente en el invierno.

Hoy, el asunto que ocasiona preocupación entre los científicos es que ya casi ha terminado octubre del 2020, y el hielo ártico no ha comenzado su recuperación normal. El crecimiento del hielo ha ocurrido mucho más lento, y no ha tenido ningún crecimiento en algunas zonas.

Las mediciones efectuadas por satélite en la zona ártica indican que este comportamiento, hasta ahora, ocupa el segundo lugar en los registros históricos, ya que el año 2012 aún se mantiene como el año récord en mínima cubierta de hielo ártico en un invierno desde que comenzaron las mediciones en 1979. Aún es temprano, pero pudiera ser que el 2020 nos deparara también un nuevo récord en este aspecto.

Aun así, si tomamos en cuenta sólo lo que ha crecido el hielo ártico en octubre de 2020, puede decirse que, para este mes, la cobertura actual de hielo en el ártico es la más baja de cualquier mes de octubre desde 1979.

La causa para que la formación de hielo en el océano Ártico esté ocurriendo con tanta lentitud en este mes de octubre, parece estar relacionada con una extraordinaria ola de calor ocurrida en Siberia, este verano, con temperaturas hasta de 5 ºC por encima de los valores climáticos normales.

A su vez, este efecto dañino, puede decirse que está relacionados, con una gran probabilidad, con los cambios que ha venido sufriendo el Clima de La Tierra debido a la influencia humana, ya que esta elevación creciente de la temperatura viene ocurriendo desde hace varios años. Los años más cálidos a nivel global, han ocurrido en los veinte años transcurridos en este siglo XXI.

Y es bueno recordar que, sin una reducción sistemática, y en la medida necesaria, de los gases de efecto invernadero en la atmósfera, existe la probabilidad de que la capa de hielo ártica desaparezca en la segunda mitad del siglo XXI, como temen muchos científicos.

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En esta imagen se muestra las anomalías de la temperatura en la zona ártica a finales de octubre de 2020. Las áreas en rojo representan temperaturas por encima de lo normal, y las áreas en azul, por debajo de lo normal.

 

A la situación de las altas temperaturas en Siberia, se le añadió la presencia de un patrón favorable en distribución de la presión atmosférica en esta región, lo que produjo que este aire cálido se trasladara desde Siberia hacia el Ártico, proveyendo así la energía necesaria para el derretimiento del hielo y que la capa de hielo ártica no comenzara a recuperarse en octubre, pues, esa situación, en general, ha continuado ocurriendo en este mes.

La gráfica que se presenta debajo de este párrafo es muy elocuente. Aquí se aprecian las anomalías de la temperatura superficial oceánica, o sea, cuan por arriba, o por debajo, está la temperatura en este octubre respecto al promedio de muchos años, o media climática.

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La gráfica muestra que, en los alrededores de toda la capa de hielo ártica, los valores de las temperaturas se encuentran bastante por encima de los valores normales en diferentes regiones oceánicas, con anomalías de más de 2 a 3 ºC.

 

Sin embargo, si vamos no a las anomalías, sino a la observación de las temperaturas que realmente están ocurriendo en esta área en octubre de 2020, observamos, y podremos verlo en la siguiente gráfica, que el Este del océano Ártico tiene temperaturas positivas, o sea, por encima de 0 ºC, y este es un hecho que hace imposible que pueda existir ahí congelamiento del agua marina.

Hay que destacar que, en condiciones normales típicas, todo el ártico debería estar ya en 0 ºC, a finales de octubre, lo que significaría que existiría ya congelamiento en toda esa vasta área, pero, por lo referido anteriormente, ello no ha ocurrido.

Con estos hechos, cabe preguntarse, ¿Qué impacto pudiera tener la menor extensión del hielo ártico en el invierno del hemisferio Norte 2020-2021 que está a nuestras puertas?

Sí tomamos en consideración que en el sistema océano-tierra-atmósfera todo está concatenado, mediante múltiples factores e influencias, podemos decir que este hecho sí va a tener una influencia y un impacto consecuente.

La disminución del hielo ártico realiza su acción mediante alteraciones en los sistemas atmosféricos, como lo son la Corriente en Chorro (Jet Stream) y el Vórtice Polar Estratosférico. Pero, además, no debemos olvidar que estaremos pronto comenzando una temporada invernal que va a estar también muy influida por el evento ENSO, en su fase de La Niña.

Todo esto puede parecer complicado, pero verán que no lo es tanto. Son temas que iré desarrollando a partir de la próxima entrega, en el primer miércoles de noviembre. Les hablaré entonces de la Corriente en Chorro, cómo domina el invierno, y mediante qué mecanismos lo hace. Hasta entonces.

 

 

 

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