Científicos cubanos aprecian bondades de los vinos artesanales nacionales
Como parte de las actividades por el aniversario 38 del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), sus científicos y trabajadores apreciaron vinos artesanales nacionales producidos por las bodegas cubanas Rodrigar y Dejoyax.
Keiler Rodríguez Blanco, propietario de Rodrigar, informó al Grupo Excelencias que ambas mipymes tuvieron la dicha de participar en una degustación especial en el CIGB, que contó con la presencia de la gran mayoría de los especialistas de esa instalación científica citadina.
Puntualizó el directivo que su bodega presentó en el encuentro Enflorado, un vino excelente elaborado de Flor de Jamaica, y Secreto Gallego, una exquisita bebida de pasas, mientras Dejoyax propuso a una exclusiva hidromiel creada a base de guayaba.
Los especialistas del centro científico capitalino, notificó Rodríguez Blanco, tuvieron asimismo la oportunidad de catar una amplia variedad de sabores y experimentar con nuevas combinaciones, dígase de tintos, rosados, blancos, dulces, secos y semi secos elaborados con frutas tales como manzana, cereza, fruta bomba, guayaba, uva y otras.
Significó además que la promoción de los vinos resultó emocionante y llena de sabor, porque pudieron mostrar los exquisitos productos que elaboran y comercializan actualmente esas dos bodegas, miembros del Club de Vinicultores de La Habana “La Giraldilla”.
Igualmente, precisó Rodríguez Blanco que además de la cata, dieron a conocer los valores y el compromiso que tienen ambas bodegas con la calidad de todos sus productos, al igual que con el crecimiento de su comercio en fronteras y para el sector turístico.
También explicó el ejecutivo que la atención y dedicación que cada una de sus marcas pone en la selección de los ingredientes y en el proceso de elaboración, aseguran la excelencia en cada producto que llega a las manos de los consumidores.
Su presencia en el CIGB, insistió el directivo, fue especialmente importante para ellos ya que les permitió acercarse aún más a los clientes, así como escuchar sus opiniones y sugerencias, por lo cual se enorgullecen de saber que fueron bien recibidos y apreciados por los asistentes.
Al concluir la ceremonia, el también presidente del Club de Vinicultores de La Habana “La Giraldilla”, trasmitió el agradecimiento de ambas mipymes a todos los científicos, directivos y trabajadores del CIGB presentes, y el compromiso a seguir brindando productos de calidad y sabor excepcionales.
Recordó que ambas marcas están registradas por la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial (OCPI) y certificadas por el Instituto Nacional de Higiene y Epidemiologia (INHEM), y ahora me encuentro esperando el análisis del laboratorio de vinos del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL).
