El Museo de la Música en Santiago de Cuba, ideal para melómanos

En el corazón del reparto Vista Alegre, una de las zonas residenciales más emblemáticas de Santiago de Cuba, se erige el Museo de la Música Pablo Hernández Balaguer. Esta institución, más que un espacio expositivo, ha consolidado su papel como baluarte de la memoria musical oriental, con la misión de preservar y divulgar el legado cultural de una región vital para el sonido cubano. En estos días, su impacto resuena aún más dentro del marco de la Jornada de la Cultura Nacional, un evento que celebra las raíces artísticas del país. 

El edificio que alberga esta joya patrimonial es en sí mismo un fragmento de historia. Antaño fue la residencia del renombrado arquitecto Carlos Segrera, uno de los grandes innovadores en la arquitectura santiaguera, cuyas obras aún marcan el carácter distintivo de la ciudad. Hoy, en su interior, se custodian instrumentos, fotografías de figuras relevantes, imágenes emblemáticas y documentos que narran los hitos de la música en el Oriente de Cuba. 

La agenda de actividades del museo, cuidadosamente diseñada para la Jornada de la Cultura Nacional, busca conectar pasado y presente, revitalizando el entorno cultural de esta urbe. Santiago de Cuba, reconocida por la Unesco como Ciudad Creativa en la Música, encuentra en el museo un aliado estratégico que traduce la historia en experiencias contemporáneas, dando voz tanto a las tradiciones más arraigadas como a las nuevas generaciones. 

Cleydis Chacón Morales, especialista principal del museo, destacó que las acciones de estos días incluyen espacios de diálogo sobre figuras claves del patrimonio musical santiaguero. La víspera tuvo lugar un conversatorio dedicado a Emiliano Bles, músico prominente de la ciudad cuya obra sigue inspirando a creadores locales. 

En paralelo, el museo acogió un encuentro de pregoneros, esos personajes populares que con sus cantos han inspirado numerosas composiciones y que representan una de las expresiones más genuinas de la música tradicional cubana. 

Chacón Morales también adelantó que el día 17 se celebrará el cumpleaños del cantante Eduardo “Tiburón” Morales, la voz distintiva de la emblemática orquesta Son 14, un grupo que marcó un hito en la música popular bailable de la isla. La celebración incluirá homenajes y conciertos, en los que se evocarán los éxitos de esta agrupación que, desde Santiago, dejó una huella en el panorama nacional. 

Además, el museo se sumará a las actividades del próximo 20 de octubre, Día de la Cultura Nacional, con un tributo especial a Perucho Figueredo, autor del himno nacional. Estas acciones no solo refuerzan la labor del museo como centro cultural, sino que también lo posicionan como un espacio vivo donde la memoria y la creatividad se encuentran en constante diálogo. 

El Museo de la Música Pablo Hernández Balaguer no se limita a ser un repositorio de objetos y documentos. A través de planes de colaboración con las escuelas de enseñanza artística de la ciudad, la institución busca integrar la historia musical en los procesos educativos, acercando a los estudiantes al legado sonoro que define a Santiago y a la región oriental. 

Uno de los pilares del museo es su centro de documentación, donde se conservan discos de vinilo y acetato, además de bibliografías especializadas que permiten la consulta de investigadores, músicos y aficionados. Esta sección del museo constituye una fuente de conocimiento invaluable para quienes buscan profundizar en la evolución de los géneros y estilos que han surgido desde el Oriente cubano. 

El equipo que trabaja en el museo comparte una visión común: más que una institución cultural, el Museo de la Música representa un sueño hecho realidad para los amantes de la historia musical de Santiago y de toda la región oriental. Para ellos, este espacio es imprescindible en una ciudad cuyo título de Ciudad Creativa en la Música no es solo una distinción formal, sino un reflejo de su vibrante cotidianidad sonora.