James Cameron producirá filme sobre buzo cubano

El cineasta más taquillero del mundo, James Cameron, producirá una película sobre el apneísta de origen cubano Francisco “Pipín” Ferraras, quien se convirtiera en 1989 en el sucesor de los célebres Enzo Maiorca y Jacques Mayol, rivales en las dos décadas anteriores e inmortalizados en el cine por otro gigante, LucBesson, con una cinta de culto El gran azul (1988).
De momento, Cameron está centrado en las tres próximas entregas de la saga Avatar, sin embargo, su pasión por los fondos marinos es bien conocida y apreciable en películas como la taquillera Titanic (1997), que le valió 11 premios Oscar y ganancias millonarias, y una antecesora menos valorada, El abismo (1989), pieza detallista y romántica en torno a misterios de las profundidades.
Con tanta obsesión filmó Cameron las escenas bajo agua (casi el 80 por ciento) de El abismo, que su extenuado protagonista Ed Harris juró nunca más volver a trabajar con el cineasta al que él y otros del elenco catalogaron entonces de tirano. El propio Harris no le ha vuelto a dirigir la palabra, sin embargo, pese a las debilidades de un guión inspirado en las fantasías adolescentes de James, los efectos especiales de El abismo envejecieron maravillosamente. Todavía impresiona el esfuerzo de los intérpretes y la construcción de un tentáculo de agua que pareciera estar vivo, sentir y transformarse a su antojo.
Para quienes conocen a Cameron no debe resultar extraño que pese a mucho trabajo e incluso retraso con la segunda parte de Avatar, el realizador canadiense decida producir una cinta basada en la historia real de Francisco Ferraras, alias Pipín, y su esposa AudryMestre, dos especialistas en apnea que intentaron superar algunos récords de inmersión.
Para mayor atractivo, la popular actriz estadounidense Jennifer Lawrence aceptó el protagónico femenino de TheDive (La inmersión), que será dirigida por Francis Lawrence. Otros títulos relevantes de este realizador son Constantine, Soy Leyenda y Agua para elefantes, y en años recientes Los Juegos del Hambre: En Llamas y Los Juegos del Hambre: Sinsajo, parte 1 y 2, interpretados por Jennifer, de 24 años de edad y ganadora de un Oscar en 2012.
En The Dive, con guión de Dana Stevens, la estrella de Hollywood más taquillera de 2014 según la revista Forbes, interpretará a Mestre, la mujer de Ferraras, fallecida en 2002 en aguas de República Dominicana cuando intentaba superar un récord mundial.
Ferraras nació en la occidental ciudad cubana de Matanzas en 1962 y consiguió su primer récord de buceo libre sin límites en 1989. Unos años después, decidió establecerse en Florida, Estados Unidos, y realizar continuas pruebas para destrozar las marcas de apnea existentes. En este quehacer conoció a la francesa Audrey Mestre, cuando ella estudiaba Biología marina. Ambos lograban descender a altas profundidades y compartían valentía y aspiraciones similares, así que la relación se consolidó como equipo al mismo tiempo en vida y profesión.
A fines de la década de 1990, el competidor de Ferraras, UmbertoPellizzari, estableció un nuevo récord al bajar a 150 metros de profundidad, y en enero de 2000, Pipín, en compañía de su esposa, viajó a Cozumel para tratar de batir la marca. Los intentos terminaron en auténtico drama, especialmente el segundo, pues Audrey tuvo que suspender la prueba en la cual Ferraras pretendía romper su propio récord de 117 metros. Al día siguiente, la también apneísta debió brindar asistencia al marido que tras lograr un descenso de 162 metros, retornó a la superficie en estado semiconsciente. En consecuencia, tal inmersión no valió para el récord, pero dos días después, Pipín repitió la hazaña de manera triunfal en un tiempo de tres minutos y 12 segundos, y así superó ampliamente la marca de Pellizzari.
Otra escena dramática fue la muerte de Audrey, pero de ese relato se encargará la película. Baste añadir que el triste suceso llevó al esposo a imponerse un record mayor. Un año después, el 12 de octubre de 2003, como gesto de homenaje, Ferraras alcanzó la meta de su esposa, 171 metros de profundidad. El mismísimo James Cameron estaba allí, filmó el suceso. Sería una burrada no contar con él para cualquier proyecto.