Normas jurídicas de MIPYMES entrarán en vigor en septiembre

Las normas jurídicas para la constitución de las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) y la transformación de cooperativas no agropecuarias y el trabajo por cuenta propia en Cuba entrarán en vigor el 20 de septiembre, según informaron recientemente autoridades del país en el espacio Mesa Redonda.

Durante su comparecencia el vice primer ministro y titular de Economía y Planificación, Alejandro Gil, aclaró que en la creación de esas organizaciones no hay limitante para que se asocien con capital foráneo o de cubanos, residente permanente en el país o fuera de él, y constituir una empresa mixta, lo cual no se contradice con las políticas establecidas en el país teniendo en cuenta los sectores prioritarios para ello.

Aclaró que se permite la inversión a los cubanos residentes en el país y a los que residen fuera de la isla, según publica el sitio Cubadebate.

Se permitirá además la exportación e importación a través de entidades estatales, algo que ya está aprobado y se realiza en estos momentos cuando cualesquiera de las nuevas formas de gestión privadas necesiten insumos adquiridos en el exterior.

El titular del ramo brindó una amplia información sobre la constitución de las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) y las reformas aprobadas para las cooperativas no agropecuarias y el trabajo por cuenta propia (privado).

Se trata de un diseño que incluye al sector estatal y no estatal para dinamizar la economía según lo previsto en la Ley de Inversión Extranjera, agregó Gil, a lo cual se suma la capacidad que se le da a las MIPYMES, cooperativas y trabajadores importados de exportar e importar, siempre a través de entidades estatales.

Agregó que ya se prepara al sistema de comercio exterior, incluso con la creación de MIPYMES dedicadas a esa actividad, y aclaró que la aspiración es que estas vez le permitan cumplir con sus proyecciones personales, porque el camino es disponer de más empleo y oferta de bienes y servicios y disfrutar de una política inclusiva, por lo que no está prohibido que esas personas trabajen en ellas.

El viceprimer ministro apuntó que la apuesta es a la producción de alimentos y de bienes y servicios de elevada calidad, para lo cual se necesitan proyectos tecnológicos en función de aprovechar el talento creado y las capacidades disponibles, por lo que los profesionales pueden ser parte de este diseño para emplearnos a fondo.

“No estamos creando un sector estatal de segunda clase ni de subsistencia, la aspiración es contar con organizaciones de una amplia base tecnológica que contribuyan al desarrollo económico y social del país, y que una vez que arranque se ajuste al modelo cubano refrendado por la Constitución de la República”, afirmó.