Cuba, el aislamiento social y la salud medioambiental

Cuando el mundo ha detenido su marcha habitual, interrumpida por la presencia de una pandemia que no solo llama a salvar vidas, sino también a reflexionar sobre modos de hacer y vivir, no todo son saldos negativos; y un ejemplo de ello, es cómo el medio ambiente se recupera.

En la central provincia cubana de Sancti Spíritus, la Covid-19 y el aislamiento social que ella conlleva, favorecen la recuperación de ecosistemas, pues al disminuir un grupo de labores en las industrias se reduce la contaminación ambiental y junto con ello las afectaciones a la salud de las personas; según afirmó Néstor Álvarez, jefe de la Unidad del Medio Ambiente, perteneciente al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), del territorio.

Allí, muchos de los sitios dedicados al turismo de naturaleza muestran señales de revitalización. En ellos vuelve a predominar la flora y la fauna en áreas donde se habían desplazado, por el accionar directo del hombre durante las numerosas caminatas diarias con visitantes extranjeros llegados al lugar.

Sancti Spíritus cuenta con varias Áreas Protegidas como el Parque Nacional Caguanes; la Reserva Florística Manejada Lebrije y la de Recursos Manejados Buenavista, que comprende las provincias de Sancti Spíritus, Villa Clara y Ciego de Ávila.

En más de una ocasión estos parajes naturales han sido escenario de importantes eventos internacionales, como el de Turismo de Naturaleza (Turnat), cuya 12 edición, en 2019, sirvió para impulsar interesantes propuestas para el disfrute de esta modalidad turística y su preservación; al visitar, entre otros sitios, la Reserva Ecológica Lomas de Banao, en el macizo Guamuhaya, considerada una de las áreas de mayor nivel de conservación de la isla caribeña. (Tomado de Prensa Latina)