Descubre el hotel Porto Santo, una perspectiva singular en Baracoa

El Hotel Porto Santo se encuentra en un punto privilegiado de la bahía de Baracoa, a solo tres kilómetros del centro histórico de la ciudad primada de Cuba. Esta ubicación permite disfrutar de vistas panorámicas que combinan el mar, la vegetación tropical y los perfiles montañosos que caracterizan el oriente cubano. El entorno natural y cultural convierte al hotel en una opción atractiva para quienes desean explorar la esencia de Baracoa sin renunciar al confort.
La instalación cuenta con 83 habitaciones distribuidas en bloques de dos niveles y 24 cabañas independientes. Todas las unidades disponen de aire acondicionado, balcón, caja fuerte, televisión por satélite y servicio telefónico internacional. Los espacios interiores mantienen una decoración sencilla y funcional, pensada para ofrecer comodidad y descanso. Desde las terrazas, los huéspedes pueden contemplar la bahía y el perfil urbano de Baracoa, lo que añade valor a la experiencia de alojamiento.
El restaurante “La Santa María” forma parte de la oferta gastronómica del hotel. Su menú incluye platos tradicionales de la cocina baracoesa, elaborados bajo el sello de la marca culinaria NATIVA. También se ofrecen opciones internacionales, disponibles tanto a la carta como en formato buffet.
El restaurante tiene capacidad para 100 comensales y opera en horarios establecidos para desayuno, almuerzo y cena. La propuesta culinaria se complementa con el snack bar “Ranchón Bahía”, que ofrece bebidas, cócteles y aperitivos en un ambiente informal frente al mar. Entre las especialidades destacan el “Baracoa Colonial” y el “Baracoa 500”, creaciones exclusivas que celebran aniversarios históricos de la villa.

Uno de los elementos distintivos del hotel es su playa privada, donde se encuentra una réplica de la Cruz de la Parra. Esta cruz representa una de las reliquias histórico-religiosas más antiguas de América, vinculada al desembarco de Cristóbal Colón en 1492. La presencia de este símbolo añade una dimensión patrimonial al entorno natural del hotel.
Durante la estancia, los visitantes pueden participar en actividades culturales que incluyen presentaciones de ritmos autóctonos como el Kiribá y el Nengón. Estas expresiones musicales forman parte del legado intangible de la región y se integran en las noches temáticas organizadas por el hotel. Además, se realizan exposiciones y ventas de artesanía local, lo que permite conocer el trabajo de creadores baracoesos.
El hotel facilita la contratación de excursiones hacia sitios de interés natural como el río Toa, el río Yumurí y el Sendero del Cacao. También se organizan visitas a plantaciones de coco y almuerzos en restaurantes campesinos como Rancho Toa y Finca Duaba. Estas experiencias permiten conectar con el entorno rural y conocer prácticas agrícolas tradicionales.
Porto Santo ofrece servicios adicionales como piscina con área infantil, atención médica, tienda, estacionamiento y conexión Wi-Fi. Su cercanía al aeropuerto Gustavo Rizo, ubicado a solo 500 metros, facilita el acceso para viajeros nacionales e internacionales.
La propuesta del Hotel Porto Santo combina historia, naturaleza y cultura en un entorno que invita al descanso y la exploración. Su ubicación estratégica, junto con una oferta integral de servicios, lo convierte en una opción ideal para quienes desean descubrir Baracoa desde una perspectiva auténtica y confortable