La Habana se prepara para nueva edición del Festival Internacional de Ballet Alicia Alonso
La Habana volverá a ser, del 28 de octubre al 10 de noviembre, el epicentro de la danza mundial con la celebración del 28 Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso. El evento, que ha forjado un legado cultural durante más de seis décadas, contará con la participación de destacados artistas y compañías de más de 15 países, reafirmando su estatus como uno de los festivales de danza más importantes del planeta.
La presidenta del Ballet Nacional de Cuba (BNC) y directora artística del evento, Viengsay Valdés, explicó a Prensa Latina que la danza es un lenguaje universal que trasciende fronteras. "En los salones y escenarios todos dialogan el mismo lenguaje", comentó Valdés, quien resaltó el carácter inclusivo y plural de la cita.
Desde su creación, el festival ha sido un espacio donde confluyen estilos y culturas de diversas latitudes. Esta edición no será la excepción, pues ofrecerá al público cubano una amplia gama de expresiones artísticas y coreográficas, con figuras de renombre internacional y la presencia de nuevas promesas del ballet.
Entre las sedes principales se encuentran el Teatro Nacional (salas Avellaneda y Covarrubias), el Teatro Martí y el Teatro Karl Marx. Este último será el escenario de la esperada actuación de Les Ballets de Monte-Carlo, que presentará Core meu, una obra del renombrado coreógrafo francés Jean-Christophe Maillot, director de la compañía. Esta presentación será una de las más esperadas, dado el prestigio y reconocimiento internacional de Les Ballets de Monte-Carlo.
Uno de los momentos más emotivos del festival será el homenaje al argentino Julio Bocca, director de la compañía del Teatro Colón de Buenos Aires. Bocca, una de las figuras más influyentes del ballet mundial, volverá a Cuba, donde realizó su primera interpretación de El lago de los cisnes durante una edición anterior del festival. En reconocimiento a su carrera y su especial relación con la isla, se le rendirá tributo con una puesta de este clásico, que además marcará su despedida oficial de los escenarios cubanos.
Asimismo, dos figuras legendarias que dejaron una profunda huella en el Ballet Nacional de Cuba también estarán presentes: el ruso Azari Plisetski y el cubano José Manuel Carreño, ambos primeros bailarines del BNC en su momento. Ambos se encargarán de dirigir ensayos y compartir su experiencia con las nuevas generaciones de bailarines, un acto que sin duda realza el carácter pedagógico del festival.
Uno de los puntos más destacados del programa será la temporada especial de El lago de los cisnes, el ballet más célebre en la historia de esta disciplina. Esta obra no se representa íntegramente en Cuba desde 2018, por lo que su regreso ha generado grandes expectativas. La producción contará con primeras figuras del ballet tanto cubano como internacional, elevando el nivel artístico del evento.
Entre los artistas internacionales que engalanarán las distintas galas del festival figuran la mexicana Elisa Carrillo, los españoles Lucía Lacarra y Joaquín de Luz, el brasileño Marcelo Gomes, la francesa Mathilde Froustey, el portugués António Casalinho, y los rusos Daniil Simkin y Semyon Chundin. Todos ellos han ganado reconocimiento en los escenarios más prestigiosos del mundo, y su participación en el festival subraya la relevancia que este evento tiene dentro del panorama de la danza global.
Además de la presencia de figuras individuales, el festival contará con la actuación de importantes compañías internacionales como Anajnu Veatem-Compañía de Danza Judía en México y la colombiana Incolballet, que aportarán una rica diversidad de estilos y tradiciones. También se presentarán numerosas formaciones de ballet de Cuba, lo que permitirá al público disfrutar de un amplio abanico de propuestas coreográficas.
Para Heriberto Cabezas, coordinador del festival, esta edición representa una oportunidad para seguir posicionando al ballet cubano en la escena mundial. Desde que Viengsay Valdés asumió la dirección del BNC, se ha puesto énfasis en ampliar el espectro de la danza en Cuba, integrando nuevas tendencias y favoreciendo el intercambio con artistas y compañías de diversas partes del mundo.
Foto: Prensa Latina
