Monte Barreto: un resurgir verde para el turismo en La Habana
La Habana, con su inconfundible encanto colonial y su vida cultural, ha encontrado en el Parque Ecológico Monte Barreto una oportunidad para revitalizar sus espacios naturales y atraer un turismo más comprometido con la sostenibilidad. En el municipio de Playa, este pulmón verde de 15 hectáreas avanza en un ambicioso proyecto de rehabilitación que no solo promete devolverle su esplendor, sino también posicionarlo como un enclave ideal para la recreación familiar y el contacto con la naturaleza.
El parque, conocido por su vegetación autóctona y su potencial como área de ocio al aire libre, había enfrentado un periodo de deterioro marcado por la falta de mantenimiento y el desinterés de gestiones anteriores. Sin embargo, un programa integral busca cambiar esta realidad. Bajo la coordinación de instituciones como la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre, la Empresa Agroforestal de La Habana, el Cuerpo de Guardabosques y la Empresa de Recreación y Turismo de La Habana (Recreatur), las labores de rehabilitación ya muestran avances palpables.
Las acciones incluyen el desmonte y poda especializada de áreas verdes, limpieza de desechos, reparación de las cercas perimetrales e instalación de nuevas luminarias en las calles adyacentes. Estas mejoras contribuyen al embellecimiento del parque y refuerzan su seguridad y funcionalidad como espacio público.
Desde 2019, Recreatur, una entidad perteneciente al Grupo Empresarial del Comercio Interior de La Habana (GECI), tiene la responsabilidad de gestionar algunos de los servicios clave en Monte Barreto. Este encargo incluye la operación de un canopy o tirolina, además de tres ranchones que ofrecen servicios gastronómicos. Sin embargo, según el vicepresidente del GECI, José Antonio González, el camino no ha estado exento de desafíos. "Hubo un impasse de deterioro debido a administraciones anteriores que no cumplieron las expectativas", reconoció.
La actual gestión de Recreatur ha enfocado sus esfuerzos en recuperar la imagen del parque, mejorar la calidad de la gastronomía y garantizar servicios que complementen la experiencia de los visitantes. González destacó que el enfoque está en ofrecer una recreación saludable, en sintonía con el entorno natural, con música ambiental de bajo volumen como parte de la oferta.
Carlos González, director de Recreatur, subrayó el esfuerzo por integrar productos y servicios de varias Unidades Empresariales de Base (UEB) bajo su gestión. Entre las propuestas destacan coctelería, aperitivos, recreación infantil, refrescos y el emblemático helado Soda Obispo, producido por la UEB Escabeche.
La rehabilitación de Monte Barreto persigue además ser un modelo de encadenamiento productivo dentro del sector estatal. Este esfuerzo integral reafirma el compromiso de Recreatur con la sostenibilidad del parque y la educación ambiental, una labor que va más allá del turismo y que busca fortalecer el vínculo de la población con su entorno natural.
Con su proceso de reanimación en marcha, el Parque Ecológico Monte Barreto promete convertirse en un destino emblemático que combina naturaleza, ocio y sostenibilidad, un espacio donde la ciudad y sus habitantes pueden redescubrir la importancia de convivir en armonía con el medio ambiente.
