Los sitios Ramsar, ideales para el turismo de naturaleza
El interés mundial por el turismo de naturaleza y aventuras creció luego del impacto causado en el planeta por la Covid-19. En Cuba se cuenta con sitios Ramsar, ideales para este tipo de ocio, según aseguran fuentes del sector.
Los sitios Ramsar llevan el nombre porque son considerados importantes a nivel internacional, y así son reconocidos por el Convenio de Ramsar, un tratado ambiental intergubernamental establecido en 1971 por la UNESCO, que entró en vigor en 1975.
El crecimiento en el interés por estos lugares naturales comenzó a notarse antes de la pandemia, pero ahora se ha disparado.
En Cuba se cuenta con seis sitios Ramsar, luego de que el país se uniera al convenio en el año 2001. Se trata de seis áreas de humedales que abarcan en su conjunto un millón 188 mil 411 hectáreas, lo cual ratifica el alto valor de los ecosistemas en el archipiélago y su importancia para la preservación de especies de la flora y la fauna.
La Ciénaga de Zapata es sitio Ramsar desde el 2001, y es uno de los lugares más emblemáticos para la provincia de Matanzas, al occidente del país.
Se trata del más grande y mejor conservado humedal del Caribe insular, con el área de pantanos y marismas más extensa de Cuba y considerables extensiones de bosques, condiciones que le valieron ser sitio Ramsar.
Se reconoce como distrito fitogeográfico debido a su particular flora, y sirve de hábitat a más de 200 especies de aves, fundamentalmente migratorias.
Otro valioso sitio Ramsar en el país son la ciénaga de Lanier, al sur de la Isla de la Juventud, que alberga varios biotopos o áreas de condiciones ambientales uniformes, entre los que destacan el bosque semideciduo, la laguna arrecifal, placeres de pastos marinos, manglares y herbazales.
En la lista Ramsar también se encuentra el humedal Delta del Cauto, un complejo de estuarios, marismas y pantanos, producto final del río Cauto, el mayor sistema fluvial cubano.
Otro lugar es la bahía de Buenavista en la región central, al norte de las provincias de Villa Clara y Sancti Spíritus, el gran humedal del norte de Ciego de Ávila, y la desembocadura del río Máximo en Camagüey.
Con la implantación de los protocolos Ramsar en dichos humedales, el Estado cubano gestiona estrategias para su conservación, que incluyen la creación de planes de manejo, establecimiento de mejores zonificaciones urbanas y agrícolas, y el fomento de la investigación científica.
Por demás, se trata de atractivos escenarios para el turismo de naturaleza y aventuras que en Cuba lo tramita, sobre todo, la agencia de viajes especializada Ecotur.