Cuba reabre, pero sigue prohibida para los estadounidenses
Cuba abre sus fronteras este 15 de noviembre, marcando una nueva oportunidad para los viajeros cansados de la pandemia y para la industria turística de la isla, pero para los ciudadanos estadounidenses llegar allí requiere tener que vencer obstáculos como nunca antes, según afirman directivos de ocho agencias de turismo de Estados Unidos.
El ex presidente Donald Trump puso fin a los viajes de cruceros, redujo los vuelos a La Habana y eliminó por completo los aterrizajes en otras provincias. Su administración prohibió la mayoría de los hoteles, el subirse a los autobuses de turismo y otros servicios, medidas que siguen vigentes bajo el mandato del presidente Joe Biden.
"Los obstáculos que ha impuesto Estados Unidos son los más grandes en nuestros más de 22 años de hacer negocios en Cuba", dijo Michael Zuccato, director de Cuba Travel Services. "Los desafíos parecen interminables en este momento. Entre Trump, la pandemia y ahora Biden", afirma Mayra Alonso, presidenta de Marazul Tours.
Zuccato, al igual que los demás, dijo que la reserva de hoteles y, en particular, la transferencia de fondos a la isla caribeña se han convertido en grandes dolores de cabeza para quienes planean viajes a Cuba desde Estados Unidos.
Muchos operadores turísticos esperaban que Biden cumpliera sus promesas de campaña y redujera los obstáculos para visitar la isla caribeña, un destino popular que cuenta con una rica cultura, playas de arena blanca y edificios históricos.
"Las sanciones estadounidenses incrementadas por Trump y mantenidas por el gobierno de Biden son una gran decepción", asegura Collin Laverty, director de Cuban Educational Travel.
Pero pese a todo esto, Cuba, que considera el turismo como la locomotora de su economía, sigue dando la bienvenida a todos los ciudadanos estadounidenses para que pasen sus vacaciones en la isla, dijo el ministro de Transporte Eduardo Rodríguez a los periodistas la semana pasada. "Hoy, Estados Unidos tiene cuatro vuelos semanales a La Habana, y los hemos aumentado a 147 por semana, incluyendo 77 a La Habana", dijo. Sin embargo, el gobierno de Biden no ha dado señal alguna de que vaya a permitir los vuelos a las provincias del país.
Tom Popper, fundador y ex presidente de InsightCuba y actual director general de 82° West Consultants, una firma de consultoría de negocios para Cuba, dijo que a pesar de las férreas restricciones de viaje a la isla, los estadounidenses todavía pueden viajar a Cuba legalmente.
"Normalmente, el mercado estadounidense ve a Cuba como una opción binaria: o se les permite viajar a Cuba o no, lo que depende de las acciones más recientes del presidente estadounidense en ejercicio", dijo.
Popper explica que los viajes a Cuba están permitidos dentro de 12 categorías, incluyendo la de Apoyo al Pueblo Cubano, utilizada por la mayoría de los viajeros, actividades periodísticas y visitas a familiares. Dijo que muchos operadores turísticos y asesores de viajes diseñan paquetes que cumplen con las regulaciones estadounidenses.
Los viajes de estadounidenses a Cuba se dispararon durante la distensión iniciada por el ex mandatario Barack Obama, quien flexibilizó las restricciones e incluso visitó la isla con su familia en marzo de 2016.
La administración Trump, sin embargo, revirtió las medidas de Obama y añadió nuevas restricciones, y luego Cuba cerró sus fronteras durante gran parte de la pandemia. Durante 2018 y 2019, unos 500.000 cubanoamericanos visitaron su patria cada año, según el gobierno cubano.
Los viajes de los estadounidenses que no son de origen cubano, por su parte, se desplomaron de 498.538 en 2018 a tan solo 58.147 en 2020, como consecuencia directa de los cierres por la pandemia del nuevo coronavirus y la vigencia de las sanciones que impusiera en su momento la administración del ex presidente Donald Trump.
Mientras tanto, Cuba reabre este 15 de noviembre al turismo. A los norteamericanos solamente les resta esperar a que, en algún momento, el actual presidente Joe Biden recuerde que hace poco más de un año prometió flexibilizar los viajes a la isla.
Con información de la agencia Reuters
