Cuba avanza hacia un futuro energético más limpio y sostenible

El compromiso de Cuba de alcanzar el 24% de generación eléctrica a partir de fuentes renovables para 2030 está tomando forma con las inversiones actuales en la recuperación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Según el ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, no solo se cumplirá esta meta, sino que incluso podría superarse, gracias a los proyectos en marcha en energía solar, eólica, hidroeléctrica y gas natural.
Uno de los pilares de esta transformación es el programa de parques solares fotovoltaicos, que prevé la inauguración de 92 instalaciones en todo el país. De estos, 46 entrarán en funcionamiento durante el presente año, cada uno con una potencia aproximada de 21 megawatts (MW). Estas plantas contribuirán significativamente a diversificar la matriz energética y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
En paralelo, el país continúa expandiendo su capacidad de generación a partir de gas natural, una fuente que ya aporta más de 330 MW. Según el ministro, existe potencial para incrementar esta cifra en unos 30 MW adicionales con la explotación de un nuevo pozo que se perforará en 2025.
La energía eólica también forma parte de la estrategia, aunque enfrenta desafíos. El parque eólico Herradura 1, en Las Tunas, estuvo detenido por impagos, pero las negociaciones para reactivarlo avanzan. De la O Levy explicó que los compromisos financieros se están cumpliendo, la asistencia técnica ha llegado y hay un cronograma para la llegada de los componentes pendientes. Si se mantiene el plan, algunos aerogeneradores podrían estar operando este año, y para el primer trimestre de 2026, el parque estaría completo, sumando 33 MW al sistema.
En el ámbito de la hidroenergía, Cuba cuenta con alrededor de 170 pequeñas centrales que brindan servicio a numerosas comunidades. Aunque algunas requieren mantenimiento y piezas de repuesto, el ministro destacó su alto nivel de disponibilidad y el papel clave de las comunidades en su cuidado. Un proyecto prioritario es la terminación de la pequeña central hidroeléctrica de la presa Alacranes, cuyos recursos llegarán junto con los insumos para el parque eólico Herradura 1.
Con estos avances, Cuba consolida su camino hacia un modelo energético más limpio y resiliente, en línea con sus compromisos medioambientales y de desarrollo sostenible.