La Niña, el Niño, Condición Neutra, en breves palabras

Redacción Exce…
20 October 2021 12:33am
Niño Niña

Por Dr. José Rubiera

En la etapa invernal del año hay una serie de factores que guardan una estrecha relación con el comportamiento del invierno, especialmente con las variables temperatura y la precipitación. Empleo aquí la palabra “precipitación” porque la misma incluye a todos los fenómenos hídricos que se generan en las nubes, o sea, la lluvia y la nieve.

Entre ellos hay eventos que se encuentra dentro del rango de la que se ha dado en llamar Variabilidad Climática, pues responde a sistemas que ocasionan un cambio apreciable de manera interanual, de forma cíclica o casi cíclica, que incluso comprende un cierto número de años. Entre ellos están los eventos conocidos como El Niño, La Niña y la Condición Neutra entre ellos.

Niño Niña

Los eventos, llamados también fenómenos, de EL NIÑO y la NIÑA se caracterizan, el primero, por el agua cálida superficial que cubre el océano Pacífico ecuatorial desde el Este al Oeste, mientras que en LA NIÑA ocurre lo contrario, el agua superficial es más fría que lo normal.

 

En otros artículos hemos tratado sobre estos eventos, pero a petición de algunos lectores, quisiera explicarlo hoy, de una manera sencilla, en qué consisten, y qué consecuencias ocasionan en el estado del tiempo a lo largo del año.

El Niño

Hay quien comienza esta historia con La Niña, pero yo prefiero hacerlo con El Niño, porque fue lo primero que se conoció.

Por muchos años los pescadores de la costa Norte de Perú habían observado que cada cierto número de años en esa zona, normalmente muy seca, comenzaba a llover copiosamente. Además, los peces que ellos pescaban, y que eran su sustento de vida, la anchoveta, desaparecía, y no podían pescar nada. La anchoveta es un pez que tiene su hábitat en las frías aguas de la Corriente de Humbolt, la cual fluye desde cerca del Polo Sur hacia el océano Pacifico oriental ecuatorial. Su desaparición marcaba el hecho de que el agua se había calentado, llevando los alimentos de esa especie de pez, y a los peces mismos, mucho más alejados de la costa.

Los pescadores observaron que esto ocurría alrededor de la misma fecha cada cierto número de años, y ocurría en los alrededores del 25 de diciembre, La Navidad, de ahí que para referirse a este evento de copiosas lluvias y la desaparición de la anchoveta, decían “ Ahí viene El Niño”.

Por muchos años la Ciencia no estudió este evento. No fue hasta un evento El Niño extremadamente fuerte en el invierno 1982-1983, el cual trastornó el Clima de buena parte del Hemisferio Norte, que comenzó a estudiarse El Niño con más profundidad, y sí, quedó así recogido, EL NIÑO, en nuestra lengua castellana.

Dentro de estos estudios también se demostró, no sólo lo que era EL NIÑO y las consecuencias que provocaba, sino que era algo que había existido por siglos y siglos, y así fue corroborado por los estudios de sedimentos que se realizaron en las islas Galápagos, pertenecientes a Ecuador.

El Niño no es más que un evento complejo que tiene lugar cuando los vientos Alisios disminuyen su fuerza, y al hacerlo, no pueden seguir empujando al agua fría de la corriente que fluye desde Sudamérica hacia el Oeste por el Pacífico ecuatorial. Cuando esto ocurre, el agua cálida que se acumula en el Pacífico ecuatorial oriental, que usualmente tiene una altura de alrededor de 1 metro más alta que el nivel de la parte oriental del pacífico, comienza a fluir al Este, sepultando el agua más fría. Cuando esa corriente llega al Pacífico ecuatorial oriental, el agua superficial está sobrecalentada por encima de lo normal. Comienza a incrementarse la nubosidad, con fuertes tormentas eléctricas y lluvias, y fuertes corrientes de aire en la atmósfera superior, a alturas de 10 a 12 kilómetros, que componen una Corriente en chorro Subtropical.

Esa corriente en Chorro será la causante de grandes tormentas en el sur de los EE.UU. y en el golfo de México. Por ello, esos inviernos son de frentes fríos frecuentes y muy lluviosos, y también fuente de bajas extratropicales que, de ocurrir en el golfo de México o el Sudeste de los EE.UU. pueden ocasionar fuertes inundaciones costeras y otros fenómenos severos, como vientos fuertes y tornados, incluso en Cuba. Recuérdese la llamada “Tormenta del Siglo” de 1993, o el brote de 7 tornados que se originaron en Mariel en 1983, junto a las grandes inundaciones costeras que ocurrieron en La Habana en ambos eventos. 

Niño Niña

Un esquema de cómo se producen El NIÑO y LA NIÑA. Ver una explicación más detallada en el texto.

 

Por otra parte, esos vientos superiores fuertes que ocasiona El Niño, hacen de factor inhibitorio contra los ciclones tropicales en la Temporada Ciclónica del Atlántico, Por eso en los años de El Niño, hay pocas Tormentas Tropicales y Huracanes en el Atlántico. Sin embargo, el agua cálida de la superficie del mar hace que las Temporadas Ciclónicas del Pacífico oriental sean, al contrario de las del Atlántico, muy activas.

La Niña

Las profusas investigaciones que se hicieron para comprender El Niño, y además los medios tecnológicos que se emplearon, como una serie de boyas en el Pacífico ecuatorial para medir los parámetros atmosféricos y oceánicos, dieron como resultado que se conociera que había otro extremo. En este caso era un evento de enfriamiento de las aguas del pacífico ecuatorial oriental, que se producía cuando los vientos Alisios se fortalecían, y empujaban al Oeste al agua superficial, por lo que el flujo del agua llevaba a las aguas frías de la Corriente de Humbolt al Pacífico oriental y al central, y de ahí hasta la parte occidental, restableciéndose las condiciones de antes de ocurrir El Niño. 

Niño Niña

Este fenómeno de enfriamiento también tenía sus consecuencias océano-atmosféricas, pues en invierno traían más sequedad y un aire más cálido al sur del continente norteamericano, dejando al aire frío más al Norte, mientras que en el verano, daban vientos muy débiles en la atmósfera superior que favorecía la formación de ciclones Tropicales en la Temporada ciclónica, de ahí que las mismas eran más activas. Sin embargo, el agua fría de la superficie del mar, hace que las Temporadas Ciclónicas del Pacífico oriental sean poco activas.

Como algo curioso, cuando este evento contrario a El Niño se descubrió, mucho se pensó en cómo llamarlo, si lo llamaban El Viejo o algo parecido, por el hecho de ser lo contrario de El Niño, pero a alguien se le ocurrió, y creo que fueron periodistas, los que bautizaron al evento como LA NIÑA, y así quedó para la Ciencia y para la gente, y también una palabra en lengua castellana.

Niño Niña

Este es el pornóstico general para los próximos meses. Obsérvese que durante el invierno del Hemisferio Norte se impondrá LA NIÑA, lo que se denota con las Anomalías de la TSM inferiores a la línea de -0.5 ºC, partiendo del evento NEUTRO acaecido hasta el presente.

 

Evento Neutro

El llamado evento Neutro no es más que el interregno entre El Niño y La Niña; se produce entre estos eventos, y los separa. 

Para clasificar si se está bajo la presencia de El Niño, se ha tomado la convención de que ello ocurre cuando las anomalías de la Temperatura Superficial del Mar (TSM) en el Pacífico oriental ecuatorial son, de manera estable por cierto número de meses, de +0.5 ºC o mayor (calentamiento); mientras que para La Niña se toma una anomalía de -0.5 ºC o menor (enfriamiento). La anomalía es la diferencia entre la TSM y los valores promedio históricos de este parámetro o valor medio de muchos años.

Pero, si la Anomalía de la TSM está entre +0.5 y -0.5 ºC, entonces no hay ni El Niño ni La Niña, y se dice que hay un evento NEUTRO. Por ciento, cuando hay un evento Neutro se producen condiciones atmosféricas que en cierta medida se parecen a La Niña, aunque no tan pronunciadas, por ejemplo, las Temporadas Ciclónicas en el Atlántico, con evento Neutro pueden ser activas, aunque no tanto como con La Niña.

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